
Echamos a andar
Bienvenidos.
La pintura, el viaje, la fusión de ambos, las exposiciones, propias y de amigos, otras, serán el tema fundamental de este blog.
Viajar es un disfrute que resulta placentero y fuente de cultura y energía para la mayoría de las personas, también para mí. Escribir unas notas del mismo y acompañarlas de ilustraciones propias, en una especie de cuaderno de viaje, dará forma, espero, a lo que vengo haciendo de manera irregular y desordenada.
Unas notas escritas ayudan a fijar recuerdos concretos, datos que se borran de la memoria. La foto es, sin duda, un apoyo permanente al recuerdo visual, pero yo creo que son las sensaciones las que permanecen en el alma. La gente que pinta, en general, es más contemplativa que fotógrafa. Lo ideal, y muchos colegas lo hacen, es tomar un apunte, yo también, pero no siempre es posible.
Obviamente, precisamos a menudo apoyarnos en una fotografía para después pintar en el estudio, pero, probablemente, el resultado será mejor si el origen no es únicamente una foto apresurada. No es lo mismo disparar y seguir camino, que, sentado en lo alto de una terraza, en una isla pequeña, contemplar cómo la tarde se desvanece, enciende el horizonte de carmín y amarillo y un pescador en la barca recoge las redes. La foto quedará en tu archivo, el recuerdo de la contemplación para siempre en tu memoria.
Por eso, en pintura, yo aprecio más la interpretación que la reproducción, la recreación cromática que la fidelidad absoluta al modelo, trasmitir el sentimiento y la emoción que la realidad.